Y si le preguntases al herido te dirá que mereció la pena. En serio, se lo pregunté y me aseguró que es lo que le responde a todo el mundo, pero para entender porqué un músicazo de los pies a la cabeza hizo el gusano en mitad de la audiencia y se haga un corte feo con vete-tu-a-saber que hubiese en el suelo, vaya al hospital y vuelva, para entenderlo necesitamos un poco más de contexto. Tranquilidad, el compi está bien 🙂

El resultado de los acontecimientos del viernes se estuvo gestando mucho antes, desde que a finales del verano pasado nuestros amiwitos Carlos «Txopelu Hoc» y Mario «SP-30» decidieron que ya habían tenido suficiente y que abandonaban la banda. Lógicamente fue un mazazo para el resto de componentes de la banda, pero decidimos marchar hacia delante y a partir de entonces la consecuencia lógica sería este concierto de regreso.

El plan era sencillo: volver a ser el mejor Bastón de la Vieja posible, traer nuevas canciones y presentarnos en directo con una banda que nos volviese locos, como es el caso de Alpargata, desde aquel Skalonge de 2015 nos quedamos prendados de su sonido, sus letras y su espectacular directo.

En la puerta de la Sala Even, justo antes de empezar, hablamos con la gente de Alpargata y nos dijeron «Bah, vamos a empezar, el primer tema es instrumental y así vamos metiendo a la gente». Y así hicieron, pero la fila de gente que iba entrando no estaba preparada para el grupazo que iban a ver. Alpargata hizo un auténtico despliegue de poder con un set ultracompacto donde su humor subrealista y su imparable latin freak fusión shockearon al personal allí presente.

Vinieron presentando su nuevo single Muelle Barón, calentito de este año, aunque por supuesto no faltaron clásicazos como Chotis fusión, La Rumba illuminati e Invasión. No les culpé no tocar Como mola ser un jipi, porque también nosotros hemos dejado de tocar algunos temas xD

Cuando nos tocó el turno de tomar el escenario, la gente estaba calentita y el abanico de emociones vividas en esos instantes previos no es explicable en palabras.

Subimos El Bastón de la Vieja. Nueva formación, nueva intro, nuevo espectáculo, y acostumbrados al setlist esgrimido en giras anteriores, abrir con Circomercial seguido de Gika cogió al público por el pescuezo y los metió en un pogo.

Tras la primera saeta de temas, procedimos a dar las buenas noches al respetable y a presentarles la primera novedad en el repertorio, Algo Nos Quieren Ocultar, teclados annunakis, latin breaks infiltrados, vientos secretos, guitarras de aluminio, letras crípticas desveladas que fueron bien recibidas por el público. La otra novedad de la noche fue Rico mundo basura (título en construcción), ska clásico con su toque punkmetal gintónico aderezado con un final Miami Piano Mafia y unas letras que nos hablan de un posible y placentero futuro infierno. Estos dos temas esperamos presentároslos pronto en un nuevo EP inminente.

Por supuesto no pudieron faltar clásicos como La niña de las rastas, La playa, Jewfro o Sin Tierra. Y ahí es donde quería llegar, fué en Sin Tierra donde nuestro amigo se hizo un tajo haciendo el gusano, pero si la única baja ha sido un amigo herido feliz que ya se ha curado, entonces ha salido de fábula.

El proceso para recomponernos no ha sido nada fácil, por suerte hemos contado con la aparición de una gran pareja de artistas como Febe (voz) y Jairo (saxo alto y coros) que nos han vuelto a completar. Muchos ensayos, reuniones, tensiones y sus resoluciones (con erótico resultado), todo un camino tortuoso para que el bastón vuelva con canciones nuevas y energías renovadas. Si nos preguntas, también te diremos que ha merecido la pena 😉

Galería de fotos sustraída fraudulentamente del Facebook de la Sala Even (si quieres reclamar autoría, déjanos un comentario 😀 )